miércoles, 9 de marzo de 2011

Tele Tienda

Bajo los efectos de un Robaxisal me senté en el sofá a la espera de sus efectos y, así, poderme reunir con mi sombra en el mundo onírico. Mientras esperaba me dispuse a zapear por los diferentes, y variopintos, nuevos canales de la TDT. Unos minutos me bastaron para, estar a punto, de decidir apagarla y mirar como la luz del semáforo  que entraba por mi ventana  coqueteaba con las sombras de mi casas. Por suerte di con el canal; tele tienda.
Joder que puto gran invento nenes (para dormir ). Solo aguanté tres anuncios, de durada media de unos treinta minutos por anuncio y todos con el mismo protagonista.
El primer anuncio lo sintonicé al final. Trataba de una fregona mágica que fregaba el suelo. Dónde estaba la magia? Pues fregaba el suelo y con agua pero sin jabón. Ellos no metían, nunca nombraron el verbo LIPIAR, solo FREGAR. Qué listos los hijos de puta!!! Como juegan con nuestra asociación directa de ideas : fregar =>limpio. Claro, como McDonals y calidad…O sea que cuando me doy una ducha en verano para refrescarme ¿puedo decir que me doy una ducha mágica? A partir de ese día si.
El segundo ya era más jodido de analizar. Se trataba de un robot de cocina anunciado por un chef de cocina (que antes intentaba fregar el suelo). Venga hombre, no me jodas!!!Un chef que anuncia un robot de cocina, acabáramos. Un estudiante, sí.  ¿Un chef ? No me jodas hombre, mal vamos para ir a su restaurante. Encima, en su robot de cocina poníamos unas patatas y salían patatas fritas, ponías croquetas congelas y salían cocinadas, ponías empanadillas y salían fritas…Así con un sinfín de alimentes bañados en harina y huevo. Los ponías en el robot de cocina y salían FRITOS. Eso en mi país de toda la vida se llama FREIDORA, mamón. Ahora ya entiendo tu restaurante, un fritanga Restaurant.
Pues el tercer anuncio, protagonizado por el mismo chef  (más parecido a Luigui de Super Mario con sobrepeso que a un cocinero respetable) anunciaba un juego de unos 30 cuchillos que cortaban hasta el cielo.  Uf, un cocinero que cocina con freidora ¿para qué quiere un juego de cuchillos?Para cortar,si. Pero cuando ves lo que corta, sabes (ahora si) que nunca irás a su restaurante. El primer inconveniente que asomaba en mi cabeza era ¿ dónde coño meto yo los treinta cuchillos que me estás vendido en mi piso de 50 metros? O este tío tiene acciones de Ikea o no entiendo dónde quieran que guarde tal barbaridad de juego. Hubiese sido más útil inventar un tipo “navaja suizae cuchillos. Vale, una vez ubicados todos los putos cuchillos de los cuales utilizaré tres, ¿para qué quiero un cuchillo que me corte un tornillo si luego lloro igual cortando una cebolla? No sería mejor inventar un cuchillo con el que no lloré que ese?La verdad, no lo entiendo pero yo ya lo tengo. Después sigues con el anuncio, y te vende un cuchillo específico para el pan. Ah!!!que sino el pan se chafa!!! Bueno, el pan lo chafas si cortas dicho alimento con una podadora, porque sino nene, como mucho sueltas unas migas. Hay más; un cuchillo para filetear el pescado!!! A ver, no me inventas un cuchillo para no llorar con la cebolla y me sacas uno para filetear al pescado que no hay peor olor que pueda habitar en nuestras manos y que nos lo filetean en todas las pescaderías del mundo? No hay futuro para ese cuchillo. El de pelar la fruta esta bien, lástima que la gente no come las 5 piezas de fruta al día ni en todo el mes. Y un cuchillo para el pollo, otro para el pavo (de diferente color que el del pollo), otro para las setas, otro para los setos….Demasiados a mi gusto.
Y es que luego los ojos se me empezaban a cerrar, no se si era por la calidad de los anuncios o los efectos del relajante….
Al día siguiente me despertó el timbre de la puerta. Al abrir los ojos, un fondo azulado iluminaba todo mi comedor. No conseguía recordar lo último que vi y me acojoné ¿ y si era Intereconomia?. Fui a la puerta y abrí. Tres paquetes a mi nombre, un remitente: tele tienda…

martes, 1 de marzo de 2011

Cumpleaños.

Me pongo a comparar y me cago. Antes celebraba finales de exámenes o Sant Patricks Days, ahora que mis amigos se casan. Joder, ellos me preguntan:

-Tío que me caso,

-Por papeles?

-No , por amor.

-Si lo tienes claro, disfruta. Es el primer paso hacia la separación.No lo digo yo, lo dicen las estadísticas.

Luego pienso  que antes cuando salía a celebrar alguna fecha señalada no tomaba nada, bocadillo de atún, kalimocho y a la calle. Ahora parezco un puto botiquín sin receta; que si el protector estomacal, que si las vitaminas antes de acostarme, el antioxidante, el beta-caroteno,el ibuprofeno al levantarme y el elixir bucal después de …Aún así , recuperarme de una fiestón (se entiende como fiestón cuando uno se acuesta dos horas después de la cena) me cuesta dos días y una bronca con la mujer. (la bronca no es porque a ella no le guste que yo salga, sino porque mi estado vegetativo más propio de un ser hospitalizado que de una persona sana, no me permite hacerle el amor. Me mareo.)

Y es que la edad, aunque nos joda, afecta, y yo lo noto. Noto como todas mis horas invertidas delante la televisión aporreando el mando de la play no me han dado un título y tampoco un trabajo. Noto como las  amenazas de mi madre después de una ardua noche se hacen realidad : Ella abría la puerta y te abría la ventana de par en par. El sol  te quemaba los ojos como el encendedor la punta del cigarro. Cuando ella veía tu cara de sufrimiento te decía “sigue así, sigue así que terminarás siendo un desgraciado”. Joder!!!l Llego a saber que mi madre era una pitonisa y le pido el número del Euromillón.. Noto como el tiempo pasa y mi sueldo se mueve menos que el bolígrafo de un funcionario….

También me doy cuenta de mi fracaso. Me explico; yo cuando tenía unos 18 años pensaba que me iba a comer el mundo. Veía mi vida y decía, joder que buena pinta. Me imaginaba a los treinta con una trabajo estable, una casa pagada, un perro que me sacara a pasear y, ¿por qué no?, una familia con la quién compartir. Menudo gilipollas estaba hecho. Maldita adolescencia y primeros romances con la noche, me hacían delirar.

Ahora tengo treinta años, ( que se dice rápido pero el carpintero más famoso del mundo murió tres años después. O sea, que si Jesús murió a los treinta y tres, no me queda tanto que disfrutar). Pues tengo treinta, mi trabajo es menos estable que el actual gobierno de Líbano.  La casa paso a piso, de piso a zulo y,  a este ritmo, de zulo a tienda de campaña. Lo más cerca que estoy de tener hijos es cuando miro al mojón reposando entre celulosa vegetal a punto de hallar la libertad cañería abajo. Y el perro, ¿Como voy a tener un perro si les tengo miedo? Ya lo decían los padres,la adolescencia es una edad tonta. Vamos, que soy todo un ejemplo para las nuevas generaciones.Pero me siento feliz. Me gusta como estoy. No sé con quién compartir si con los de 25 o con los de 35. Los de 25 les damos envidia porqué somos maduros con mucha vida en nuestras espaldas (eso se creen, en realidad tenemos mucho sofá en nuestro culo). Los de 35 nos miran con recelo,envidia, rabia. Nosotros tenemos un cero y ellos van a por el siguiente nivel. Esa envidia sana, que tanta falta hace. Porqué cuando uno esta jodido, ¿qué mejor que mirar al que está peor?

Por eso yo voy por la calle y miro a los que van a por los 40, esos si que están jodidos,yo nunca estaré como ellos…